lunes, octubre 27, 2008

La niebla


Finales de verano de 1983. (Es una estupidez, pero nos sirvió para contarlo cientos de veces a cientos de chicas).
Habíamos pasado la noche en Torrevieja con un grupo nutrido de amiguetes engullendo bebidas espirutuosas y callejeando. Como era costumbre, la noche acababa despertando a un coleguilla que trabajaba en la plaza de toros y la subsiguiente suelta de vaquillas a puerta cerrada.
Después de demostrarlos nuestra falta de valor unos a otros decidimos volver a la playa de San Juan, dónde pasabamos unos días entre bolo y bolo.
Un 127 amarillo y un peugeot 505 negro, cargados de música y de 5 descerebrados por coche, goin' home.
A la altura de unas salinas por las que solíamos pasar de regreso una densa niebla nos comienza a cubrir. Entre los dos coches se ha situado un citroen con dos sexagenarios. El trayecto hasta Alicante suele durar bastante por esa carretera. La niebla se hace mas y mas densa. De repente, tras una curva cerrada, todo se despeja y aparece la ciudad. No han pasado ni tres minutos desde que entramos en la espesura y ya estamos en Alicante....imposible. Paramos en el arcen. Los sexagenarios también lo hacen. Increible, pero todos flipamos, los sexagenarios mas que nosotros.
Y ya está. Una cutrez. Si por lo menos hubiéramos aparecido en el Yucatán.

3 comentarios:

tom el sueco dijo...

Juama,enhorabuena tu blog.
Bien escrito y pensativo

Ah...The Road....goes on forever..
and the party never ends!

Abrazo

T

NoSurrender dijo...

a mí me pasó algo parecido, hace mil años, entre Valladolid y Salamanca. Fue al amanecer, y aún recuerdo la sensación de magia, como en esa novela de Toorente Ballester, La Saga/fuga de J.B.

Juanma, estoy impresionado de encontrarte en blogspot y de que encima tengas enlazado a un amigo, Cielo Vacio. Llevo mucho tiempo queriendo hablar en mi página sobre Los Elegantes, el grupo que tenía el mejor sonido en aquella época, pero no encuentro youtubes que hagan honor a lo que hacíais. Os he visto tocar tantas y tantas veces.

Gracias por la música, por la fiesta, por las emociones. Gracias, tío.

Anónimo dijo...

q chevere